Queridos miembros de la Comunidad Viatoriana:

Les envío a todos y a cada uno un cordial saludo y mis mejores deseos. Espero que este mensaje les encuentre con buena salud y un espíritu renovado, mientras caminamos en este tiempo de Adviento preparándonos para acoger al Señor en nuestras vidas. Que estos días de Adviento sean para ustedes un tiempo de reflexión y preparación.

Durante algún tiempo, los miembros del Consejo General, junto con otros miembros de la Comunidad Viatoriana, han estado reflexionando y planificando el Capítulo General de 2024. Les escribo para compartir algunos de esos planes y para animarlos encarecidamente a participar en el tiempo de preparación del 31º Capítulo General de la Congregación, que se celebrará en la Casa Divino Maestro de Ariccia, Italia, del 3 al 24 de julio de 2024. Este importante momento de la vida de la Congregación nos invita a reflexionar y a profundizar en nuestro compromiso con el futuro de la Congregación.

Queremos resumir todas estas tareas en un tema que proponemos para el 31º Capítulo General: «VIATORES: RENOVEMOS NUESTRA COMUNIÓN Y NUESTRA MISIÓN.» Para ello, les invito a entrar con entusiasmo en un proceso de preparación y a adoptar una metodología que será diferente de la de los Capítulos anteriores.

Este proceso y esta metodología nos ayudarán a redescubrir la identidad de nuestra vocación viatoriana, a la luz de la experiencia del carisma del Padre Querbes, de la llamada de una Iglesia «en salida» y ante los desafíos que el mundo nos está lanzando hoy. Estoy seguro de que, si vivimos este proceso con autenticidad y apertura al Espíritu, la renovación de nuestra comunión y de nuestra misión, sea cual sea nuestra situación personal y comunitaria, conocerá un nuevo y renovado vigor.

En un reciente discurso a la Unión de Superiores Generales, el Papa Francisco nos recordó que los Capítulos Generales son un ejemplo vivo de la llamada a la sinodalidad en la Iglesia de hoy. Se convierten en momentos en los que nos escuchamos activamente unos a otros mientras discernimos colectivamente las orientaciones futuras de nuestra Congregación. Espero que nuestra reunión en Ariccia se convierta en ese momento para nuestra Congregación, mientras discernimos juntos la dirección que ella ha de tomar en los próximos seis años.

En las próximas semanas recibirán una descripción del proceso que vamos a seguir en la preparación del Capítulo General. Incluirá varias preguntas para la reflexión personal, comunitaria y provincial.  Su participación personal y comunitaria en este proceso en los meses previos al Capítulo General será esencial para que tengamos un Capítulo fructífero.  Pediré a los Provinciales y a los responsables de las Fundaciones que faciliten esta reflexión y preparen una síntesis de esas conversaciones y reflexiones locales y provinciales.

A partir de las síntesis del discernimiento realizado por las Provincias y las Fundaciones, invitaremos a los delegados del Capítulo General a vivir durante el Capitulo mismo,  un tiempo más largo dedicado a la escucha, a la oración, al diálogo y al discernimiento, mientras tratamos de descubrir lo que el Espíritu está suscitando en nuestra Congregación.

El programa y el proceso del 31º Capítulo General proporcionarán tiempo, en la primera semana, para recibir el informe sobre el Estado de la Congregación, el Informe Financiero, los resultados de la Síntesis del discernimiento efectuado a nivel local y provincial y un tiempo significativo para la escucha, la oración y la reflexión.

Insisto una vez más en que su participación personal y comunitaria en los meses previos al Capítulo será decisiva para el éxito de este proceso. Su reflexión sobre los retos a los que se enfrenta la Congregación en Comunión y Misión y las opciones apostólicas que debe realizar  la Congregación a la luz de esos retos es uno de los aspectos más importantes de nuestra preparación colectiva para el próximo Capítulo.

La segunda semana proporcionará tiempo para el trabajo en comisiones sobre las cuestiones presentadas para el orden del día del 31º Capítulo General. En concreto, es de esperar que este momento tenga éxito a la luz de la reflexión y el discernimiento realizados durante la primera semana.

Finalmente, los últimos días del Capítulo General permitirán a los delegados ofrecer conclusiones y recomendaciones concretas para nuestra renovación en la Comunión y en la Misión. Estos días también serán el marco de la elección del Superior General y de las conclusiones para los próximos seis años en la vida de la Congregación.

El Capítulo General es la autoridad suprema de la Congregación (C 43) y es responsable de manera especial de la fidelidad de la Congregación a las intenciones de nuestro Fundador y a nuestra Constitución. También es responsable de promover la vitalidad de la Congregación. Como todas las comunidades religiosas de hoy, debemos discernir continuamente cómo elegimos nuestras prioridades de acción, al tiempo que leemos los signos de nuestro tiempo. Espero que el 31º Capítulo General promueva esa vitalidad con un entusiasmo renovado y una fidelidad creativa a la visión del Padre Querbes.

Al embarcarnos en este tiempo preparatorio, les pido de nuevo su participación y su compromiso personal en la preparación del próximo Capítulo General. Que el Espíritu de Dios infunda en cada uno de nosotros la apertura y el valor para mirar al futuro con fe.

Mis mejores deseos para cada uno de ustedes, que acompaño con mi oración para que las bendiciones de Dios llenen abundantemente sus vidas.

 

Afectuosamente en Viator y Querbes,

Robert M. Egan, CSV
Superior General